Una compañía australiana presentó un pequeño motor eléctrico que ofrece cifras de potencia y torque impresionantes. Se trata de HyperPower Tecnhnologies, una empresa que desarrolló un propulsor eléctrico compacto que puede ofrecer unas cifras impresionantes, con un tamaño de apenas 43 centímetros de diámetro. Y es que, pese a sus reducidas dimensiones, el QFM-360-X es capaz de desarrollar 1,360 caballos de potencia.
Lo más interesante de todo ello es que sus creadores han diseñado un producto escalable, por lo que se pueden unir varias unidades.
De hecho, el objetivo final de esta compañía es poder acoplar 10 motores para poder formar un propulsor capaz de ofrecer 13,600 caballos de potencia, aunque no especifican si también cuentan con una batería capaz de alimentarlo por un tiempo razonable y funcional.
"Este motor es la culminación del esfuerzo de mi carrera y es un hito notable que nuestro equipo ahora lo tenga en producción, con un montaje de volumen en paralelo", señaló Michael Fragomeni, fundador de la compañía australiana.
Esta configuración no está pensada para un vehículo de calle, sino para aplicaciones en la industria aeroespacial, trenes de alta velocidad y vehículos para la minería, entre otras. Eso no quita para que podamos ver en un futuro cercano algún superdeportivo eléctrico homologado para la calle dotado con una o dos unidades de este tipo.
El motor ya se está produciendo y la primera demostración de su gran potencial se llevó a cabo junto al equipo de carreras Top EV Racing, en una pista de competición, en un vehículo dragster equipado con cuatro de estos motores, que en total suman 5,440 caballos de fuerza y un descomunal torque de 16,963 libras-pie.
Definitivamente son cifras que llaman poderosamente la atención, sobre todo cuando te enteras de que este vehículo es capaz de alcanzar 200 km/h desde cero en 0.8 segundos. El equipo tiene como objetivo obtener ocho récords mundiales con este vehículo, incluido el récord de velocidad en tierra establecido en 612 Km/h.